Si bien es cierto, la bomba Leyland podría ser considerada como una bomba más de nuestra Compañía, su historia y significado la hacen una pieza de material mayor sobresaliente.
A fines de 1959 se formó un Comité de alto nivel para obtener financiamiento para la adquisición de nuestro propio carro bomba de fabricación británica. El lema de la campaña de financiamiento se conoció cómo “Operation Firebug”. Las empresas Británicas asociadas con la “Operation Firebug”, tales como Williamson Balfour, George Angus y muchas otras, sacrificaron sus comisiones y aportaron fondos para la importación de la máquina.
El 20 de Septiembre de 1960, el Cuerpo de Bomberos de Santiago aprobó las especificaciones de nuestro nuevo carro Bomba “Leyland Firefly”, que nos costaría nada menos que 12,000 libras esterlinas de aquellos años. Las especificaciones incluían cuanto equipo de última generación existía; quizás por el peso que significaba todo este equipo y su estanque de gran capacidad, era un poco lerda para arrancar y agarrar vuelo. Pero una vez en acción, no había turbina en el Cuerpo que se la ganara.
Nuestro nuevo carro bomba arribó a fines de Abril de 1963 al puerto de Valparaíso a borde de la MV “Sarmiento”. Finalmente en el Cuartel, el 6 de Julio de 1963 se efectuó el bautizó de lo que considerábamos como el “mejor carro bomba de Chile sino de Sudamérica”. Dotado de la última tecnología de punta – para la época – y construido enteramente a nuestras especificaciones, era una joya. Sus madrinas fueron la Señora de Figueroa, esposa del Superintendente del Cuerpo, Don Hernán Figueroa Anguita, Mrs. Summers, esposa del Excelentísimo Embajador de Canadá y Mrs. Mackenzie, madre de nuestro Director Mr. Douglas Mackenzie y gran apoyo de la Catorce.
Al finalizar el bautizo, el Secretario de aquella época, Mr. Dorrien Cooper, terminó su discurso con palabras que son dignas de recordar: “Que Dios proteja a todos lo que tripulen esta máquina”.
Durante esta ceremonia de bautizo, el Presidente del British Commonwealth Society entregó al Superintendente del Cuerpo de Bomberos un cheque por Eº 33.000. Esta gran suma había sido recolectada entre la comunidad y sus amigos chilenos en muy corto plazo. Sin embargo, faltaban aun Eº 4.500 para alcanzar a cubrir enteramente el compromiso adquirido por la Compañía de cancelar el 50% de los gastos incurridos por el Cuerpo al instalar nuestro Cuartel y los de la importación de la “Leyland”. Pocos días después, y en términos excepcionalmente conceptuosos, el Secretario General del Cuerpo nos informó que el Directorio del mismo había acordado condonar el saldo pendiente, reconociendo el real esfuerzo que se había hecho para reunir la cantidad que entregamos, en tan corto plazo.
Al día siguiente, y apropiadamente en el Parque Gran Bretaña, el Cuerpo en tenida de parada y con todas sus máquinas, dio la bienvenida al “Leyland” y despidió al “Delahaye”, mejor conocida por nosotros como “Adelaide” o “The Old Meat Wagon” que fue dada de baja del Cuerpo. El Voluntario más anciano y el más joven de la Compañía, Captain Graham Balfour y Mr.Peter Grundy fueron elegidos para cambiar el estandarte de la Compañía desde la “Delahaye” a la “Leyland”.
Fue un momento emocionante, cuando la “Delahaye” se retiró lentamente acompañada del lamento de las sirenas de los Carros Bomba reunidos. En la ceremonia habló el Señor Superintendente y el Embajador de Gran Bretaña Sir David Scott-Fox